Un Pospuesto reencuentro[Anto]

Estaba terminando un turno, después de mas de un día sin dormir. Estaba en el baño mientras arreglaba mi maquillaje, tenia los ojos cansados, se notaban las venas de mis ojos… así que puse algunas gotas de poción en mis ojos, algo mas en los parpados y luego retoque mis labios con un rojo brillante. Me encantaba lucir sexy cuando salía del hospital, arregle la camisa negra de seda y mi falda que era muy corta para una sesión de trabajo. Salí del baño cargando la bolsa y con una sonrisa burlona, pero entonces fui atacada por una lechuza… el animal me entrego una nota, que tuve que leer.

Pero la nota me alegro, tanto así que corrí a buscar en mi casillero otra ropa, estaba de buenas. Saque unos leggins y un top rojo, mis zapatos de tacones alto y el cabello desordenado, todo de la moda muggle mas nueva, unas pulseras y unos aros largos de cadena. Cuando volví a salir al pasillo mi apariencia llamaba la atención, pero para completar el atuendo unas gafas negras. En la calle caminaba muy coqueta meneando las caderas y haciendo sonar mis tacones, con una simple aparición llegue cerca de mi destino, levante las gafas mirando el caldero chorreante.

Entrando mire a todos lados e identifique a mi presa, bueno mi amiga.- Hey! Love!..- la llame, mientras di algunos saltos cuando camine hacia ella. Mis tacones resonaron y mientras sentía la mirada de muchos sobre las curvas de mi cuerpo. Fui a dar a su cuello por su espalda y aproveche la poca distancia para pegarle un beso en la mejilla, pero uno bien provocativo.- i miss you..- le dije soltándola. Mientras que con un habilidad que solo dan los años robaba su vaso y me giraba bebiéndolo..-

Escuche el estupida loca y solo me hizo beber mas rápido para contestarle. Solté un ruido casi orgásmico cuando acabe el licor, y mis ojos por detrás de las gafas se fueron a su rostros, mientras mordía el labio inferior de lado. Se vía como lo que una ves fue una niña buena, pero yo sabia lo muy mala que podía llegar a ser y con orgullo decía que todo lo que sabe, lo aprendió de mi. Cass y Chris, eran mis dos orgullos, las únicas dos que se habían apegado a mi y a mis principios.

Su comentario me dio algo de risa, yo tardarme?. Pase mi mano por el cabello para hacerlo mas loco y luego de ese gesto me fui acercando mas a ella y subiendo mi mano por su brazo hasta reposarlo en su hombro. Todo gesto en mi cuerpo, por muy inocente o sutil, lo convertía en algo provocativo y sensual. Pero mi mano no quedo ahí, siguió subiendo hasta su cuello y mas allá, llego a dar a su mentón para regalarle una suave caricia.

- ajajá se que me extrañabas…- con mi otra mano quite mis gafas, un rostro fresco y radiante gracias a las pociones que yo misma había fabricado, jamás en mi vida me presentaría a una cita con los ojos rojos u ojerosos.- pero amor, sabes que lo nuestro será eterno..- me adelanto con las caderas y suelto las risas, seguro que esa escena candente los dejaría un poco ocupado.- ¿Qué tal la vida glamorosa del modelaje?..-

Deje mi actuación de sexy para dar paso a la Flo de siempre.

Claro que seguía igual, pensé para mi. De que otra manera podía ser, le saque la lengua burlona. Aunque ella se veía algo mas calmada, menos alocada, era como si estuviera viendo los comienzos de nuestras relación, después de tanto esfuerzo y tiempo que había invertido en ella… me sonreí nuevamente. Mi Cassi no sería así, ella me lo había afirmado. Sus palabras eran ciertas, la cambiaria por un buen trasero de hombre, aunque no me haría a un lado para pasar una noche con ella, tenia unas piernas largas y muy firmas, me daban ganas de apretarla, pero estaba muy segura de que ella no estaría tan receptiva a hacer un reencuentro tan físico como aquel que se formaba en mi mente. Pero ella no podía negar que aquella noche la había hecho gemir de placer como ningún hombre lo había hecho, algo que yo tampoco olvidaría.

- por eso es que lo nuestro no funciono, siempre pensaste que te sería infiel, cierto… pero que tiene de malo compartir?..- solté una risa. Puse mi codo en el mesón y con el puño cerrado apoye mi mejilla en ella. Le dedique una mirada y escuche sus nuevas.- las perras son cosa de todos los días, siempre hay una que se cree mejor, pero solo tienes que patearle el culo para ponerlas en su lugar.- un tipo me miro y le sonreí estupidamente.- es un fastidio…- saque mi cigarrera de plata, esa que me caracterizaba y la deje en el mesón abriéndola y sacando en encendedor, del mismo material, plata con oro.- aquí tienes amor, fuma todo lo que quieras, tengo mas escondidos por ahí..- le guiñe el ojo sacando uno y poniéndolo en mi boca, lo encendía y deje escapar un humo blanco, ese que tanto me relajaba.- entonces, que haces en Londres… no me digas que dejaste tu carrera?…- levante la ceja derecha.- por que si es así, tengo que hacer una fiesta para darte la bienvenida como díos manda..-

Seguramente mi locura se había hecho mas grande con los años de ausencia, no sabia que tenia tantas noticias nuevas, como Matt… mmm ese era un caramelo que comía sola, pero que me gustaría presentarlo. Pero mas allá de eso prefería darle una fiesta algo privada, pero no por menos divertida.

Alce una ceja, yo fiel?… si podría serlo… pero era mas divertido andar de tipo en tipo, así nunca me aburría de las cosas, un concepto muy valido, la vida se trataba de el movimiento, evolución o como quisieran llamarlo. Me cruce de piernas mientras volví el rostro al frente mientras mi garganta era humedecida por el licor.

- la fidelidad es un concepto sobre valorado, si fuéramos una especie monogamia, seríamos como las tantas aves, que luego de morir sus parejas jamás vuelven a tener una… - medio asentí con la cabeza mientras se dibujaba una sonrisa burlona en mi cara..- pero somos mas como los perros… vivimos en un constante cambio y celo..- la mire con sorba y le saque la lengua.-

Quien podía juzgarme, todos eran así, quizás no tan evidentes y descarados pero si lo eran en el fondo. Me estaba por tomar lo que me quedaba cuando ella me abrazo, lo hizo con algo de provocación y yo, no era de las que no jugaban, me encantaba subir la apuesta una ves que iniciaba la partida. La aprete un poco mas pegando nuestros senos y luego la solte, pero no para darle liberta, lejos de eso mi mano subio a su pecho izquierdo apretandolo entre mis dedos, de una manera muy suave y delicada. La mire amenazandola con un beso.

- si pero tu estas mejor… deberíamos hacer una celebración privada en mi cuarto, una rememoración por los viejos tiempos..- ese tono sensual que me caracterizaba y que volvía loco a los hombres.- Oh... será que tus gustos cambiaron mucho desde que estabas de súper modelo..- me burle un poco porque solo era una broma.-

Levante ambas cejas juguetonas mientras la rondaba con la mirada, era simpático volver a tenerla cerca de mí, era como tener un juguete al cual atesoraba, claro que yo la respetaba mucho como para lastimarla, como a Cass, eran personas importantes, no podría decir que les tenia una emoción en particular, solo sabía que eran parte de mi pasado y presente, que habían ayudado a construir lo que yo era en este entonces. Podía sentir murmuras a las personas, era lógico, yo era una descarada sinvergüenza, podía meterle mano a Chris ahí mismo y no importarme nada.

- si pero ya no me acuerdo si era tan dulce o mas acido… - me puse a prestar más atención a mi vaso que a las curvas de mi amiga, o me iba a tentar a darle una mordía a esos labios.- pero esta bien, no voy a intentar recordar, además tengo una fruta mas sabrosa que hacer me espera en la casa..- desordene un poco mi cabello me gustaba tener un look algo loco y como recién saliendo de una cama, post sexo obviamente.-

Cuando ella lleno su vaso yo puse el mío de por medio, le lance un beso en el aire seguido de una risa, esa que era mas burlona que nada. me pregunte si Matt tendría ganas de sexo, quizás me le aparecería en su oficina para un rapidito, obviamente después de que terminara mi platica con Chris, pero… abrí los ojos cuando me dij que si quería una noche y luego estire mis labios en un puchero.

- me ilusionas con la noche y luego rompes mi corazón, por eso jamás serías una buena novia… - le guiñe un ojo mojando nuevamente mi garganta con el licor.- pero esta bien, solo dime cuando tienes tiempo… porque yo siempre hago tiempo para ti, ya me imagino una alocada noche, o mejor nos vamos a un bar a levantar los humores de los hombres..- hago un gesto con mi dedo índice, haciendo una alusión al sexo de los hombres.-

Pase la lengua por mis labios, ella había picado la carnada, si era una forma sutil de comenzar el juego, eso que siempre rondaba en mi vida y era parte de mi existencia, vivía para disfrutar de mis desafíos y victimas. Ese sutil movimiento de mi lengua sobre los carnosos labios volvía loco a mas de uno, pero a ella no le resultaba mucho mas sexy que verme desnuda y en cierta medida me molestaba. Cuando se tenia tanta intimidad con las personas uno perdía terreno y armas.

- pero que demonios…- dije exaltada, no me gustaba usar la palabra amor, enamorada, etc… era casi tan ofensivo como si llamaras discapacitado a una persona.- sabes que eso no me pasa, ni aunque tuviera una contusión cerebral. Pero… - deje una pausa, porque no era amor… pero se asemejaba en muchos aspectos al concepto.- es diferente.- esa palabra fue dicha con seriedad. Mis ojos buscaron los de ella, clavándose fijos.- se llama Matthew de Valois… y es un lobo en personalidad..- la mejor palabra para definirlo. Me sonreí y alce el vaso, me alegraba de conocerlo, era divertido, espontáneo y me hacia jugar.-

No le dije que teníamos una relación, eso estaba de más, aun no podía asumir francamente que estaba involucrada con un hombre, no después de gritar a los cuatro vientos lo molesto de esas cosas. Me imaginaba de nuevo en la cama cubierta con chocolate, algo que no se podía hacer siempre pero muy divertido.

- ajaja… diablos, si pasaran una noche en la cama de ese hombre entenderías…- me saque los peros con una declaración mas mía. Moví coquetamente los ojos a mención de mi hermano. Nunca se me pasaría por la mente algo como… un trío con mi hermano.- sabes que tengo dos reglas…- el código de una zorra con moral, como le decía mi cass.- no hombres casados y jamás incesto..- bueno tampoco nada con animales y menores de edad.- solté una risotada que casi asuste a los que estaban cerca.- por lo demás… todo vale.- le guiñe el ojo. Ya poniendo una cara más sería.- pues sí, Erik esta tan bueno como yo… así que tienes un pase libre a su pantalones… falta que le hace..- añadí.-

Solté una carcajada, esta mujer probablemente era la menos informal existente, y aun así tenia ese aspecto de elegancia que otros con tantas ganas anhelaban. Y aun así con toda esa informalidad, elegancia y picardía lograba cautivarme cual niña pequeña admirando una gran figura de autoridad. Miro su forma de expresarse y por como hablaba iba en camino a algo más serio de lo normal -me dirás que llevas más de un mes acostándote con él?- Pregunto suspicaz, la conocía lo suficiente para saber cuánto duraba con sus ligues y no era tanto, al menos no cuando era solo con uno.

Bebí de mi trago cruzando mis piernas ahí donde estaba sentada, apoyando mi espalda en el mesón para estar mas cómoda -Siempre hay un hombre mejor que otro- Anuncio con la misma expresión sonriente en mis labios, yo lo tenía claro. Siempre cuando creías encontrar al mejor en la cama aparecía otro que podía dejarte sin aliento, era como un circulo vicioso inacabable.

Erik Krahm, definitivamente me encantaba aquel hombre era la mezcla perfecta para un hombre, completamente irresistible e inteligente ¿Donde mas había uno así? Probablemente no había ninguno como él en este rango y eso le daba una ventaja sobre todos los otros seres de este planeta. Aunque muchas veces se preferiría hablara menos. Pase la lengua por mis labios cuando Anto lo sugirió, quería probarlo y nadie lo negaba, menor yo que en verdad me interesaba, no como algo serio sino mas bien para decir que también probé de aquel fruto como decía su propia hermana -perfecto, si tengo tu permiso nadie lo evitara-

Un mes… bueno casi un mes, desde que lo conocí y la mitad desde que nos hicimos formalmente una pareja libre de todo. De las ataduras de las cosas malas de las cosas que eran estupidas como los celos, lo único que habíamos hecho como una pareja medianamente normal era darnos nombres, cosa que era más que nada cómoda. Me TOM mi vaso que había sido recargado, todo de un solo golpe… como estaba acostumbrada.

- ni te lo imaginas Chris…- suspire echando la cabeza hacia atrás y sacando un cubo de hielo, lo pase por el cuello porque estaba un poco acalorada.- ese Matt me deja exhausta, y sí… de hecho llevo casi un mes saliendo con él, hasta tenemos nombres para cada uno!..- alce el vaso.- soy su bebe y él es mi Matty… como la ves….- alce las cejas sonriente.- estoy en una relación… y no es solo sexo, aunque es un 50% de los motivos..--

Pensar que Erick se acostara con ella me daba un poco de celos, sí… era celosa, en lo profundo de mi interior tenía esos bajos instintos de las personas con un CI de menos de 100, pero no eran los típicos celos, sino que eran unos celos por la figura idealizada de la persona.

- pero no lo hagas en nuestro depa, que no me gustaría ver tu trasero desnudo salir de su cuarto o me darán celos…- la miro irónicamente..- pero si lo haces en el depa y luego te pasas a mi cuarto podría perdonarte..- me baje de la silla y extendí mi mano hacia ella.- vamos ya me aburrí de este lugar, no hay hombres buenos ni música divertida….-