Primera Clase de Runas Antiguas

La primer clase de la mañana. Me gustaba levantarme tomar una ducha fría y comer mis donas, si era adicto a las donas con relleno. Hoy había omitido la lucha diaria, mis zapatos, solo avance en mi rutina, sin zapatos y con unas zapatillas de levantarme, me dirigía hacia la sala de clases, con mi inconfundible traje color gris oscuro y mis camisas de colores un tanto extrañas hoy era de color rosa pastel, mi hermana me la había dado en navidad y no tenía uso, con una corbata de lunares amarillos en fondo negro. Caminaba marcando el paso de una canción, mejor dicho un spot publicitario de Mr. Músculos, me gustaban mucho las canciones de los comerciales y algunos eran bastante ingeniosos. Mire el reloj de mi muñeca y faltaban 16 minutos para las 9.

- ahh díos, no alcanzo a tomar un café..- me queje, y fruncí el ceño. Sin mi café matutino el día no podía empezar bien..-

Seguí caminando hasta mi sala y deje la puerta abierta para dar a entender que estaba abierto y cualquiera podía entrar. Pasando hasta el fondo de la sala deje caer el bolso con una cantidad sorprendente de apuntes, más que nada propios. Mire la pizarra y frote mis manos a la ves que alargaba los labios y comenzaba a tararear una canción de una reconocida marca de pañales. A medida que escribía en ella mi mano se llenaba del polvillo blanco. Termine en cosa de segundos, no era mucho - Profesor Allen Wilfred, Runas Antiguas. Horario: Mates 9 am. - y luego sacudí el polvo aplaudiendo. Saque del bolsillo interno mis gafas y me las puse.

Me senté en el escritorio y observe la puerta, pretendía que este año la convocatoria de mis clases fuera un poco más esperada, con algo más de cariño. Puse mis manos en el borde de la mesa y los movía nuevamente al ritmo de las canciones de comerciales.

reglas:

Freddy se había levantado muy temprano ése día, no sabía qué clase le tocaba, ni a dódne ir, estaba desorientado. Tomó su mochila repleta de libros de todas las asignaturas, en realidad se llevó dos mochilas, una le iba a servir. Se dirigió al Gran Comedor y tomó desayuno tranquilamente, tostadas con mermelada, una taza de té y una manzana muy roja y brillante lo mantendrían en la mañana. Miró un reloj de uno de sus compañeros y se fijó: 10 minutos para las 9. Vió como sus compañeros se retiraban y los siguió, entre tanto subir escaleras llegó al Sexto Piso, caminó por sus pasillos y de repente chocó con una puerta abierta, se levantó cogió sus pesadas mochilas y echó una mirada al salón. Era el Aula de Runas Antiguas vió a un hombre extraño, vestido con una túnica rosa pastel.
-Buenos días, Sr. -dijo tímido Freddy y miró un pizarrón que había en la sala- "Allen Wilfred, Runas Antiguas. Martes 9 AM" -leyó y entró a la sala-. Con permiso, señor, creo que aquí me quedo.... -dijo Freddy casi suspirando, miró el lugar y sonrió.
Siempre le habían interesado Runas Antiguas, pero los años anteriores nunca les puso anterior, por lo cuál su T.I.M.O de ésta asignatura lo casi reprobó. Esperó a que más compañeros llegaran y lo que más deseara que fueran de Ravenclaw y hasta quizás por la excelente asistencia de su casa hasta puntos ganaran.
-Entonces... Todos los martes a ésta hora Runas Antiguas -dijo tratando de buscarle conversacion a su maestro para no aburrirse.

A las siete y media de la maña Chloé se había despertado con una sonrisa y tras ducharse y ponerse el uniforme había bajado a la Sala Común con su mochila. Una vez allí había comenzado a seleccionar los libros que creía que iba a utilizar aunque aún no tuviera su horario, de todas formas el Gran Comedor no estaba muy lejos y no tardaría mucho en ir a por lo que le faltara una vez tuviera su horario.
Mientras desayunaba repasó mentalmente lo que llevaba en su mochila de cuero marrón desgastado por los años y el uso: libro de Pociones, de Transformaciones, de Cuidado de Criaturas Mágicas y de Herbología; varios pergaminos guardados en una especie de carpeta de tela, dos plumas y un juego de tintas de colores guardados en una preciosa, y sorprendentemente ligera, caja de madera; el mapa y una agenda que aún no había estrenado y que Chloé tenía la seguridad de quue iba a acabar olvidada en su baúl.
Este año tenía que esforzarse el doble que los anteriores, el año de los temidos T.I.M.O.S. no iba a poder con ella. Se había propuesto estudiar un poco cada día, dejar de tener despistes a la hora de entregar las tareas y trabajos, y no llegar tarde a las clases. Por eso cuando alguien dejó un horario cerca de ella casi se atraganta con su zumo de calabaza, su primera clase de Runas Antiguas era dentro de media hora y ella todavía tenía que ir a su Sala Común a por el libro y subir hasta el sexto piso sin perderse, el tiempo había pasado demasiado rápdo. "Tranquila, lo conseguirás".
Con este pensamiento en su cabeza dejó su desayuno a la mitad y salió corriendo hacia su habitación, en la cual cogió uno de los libros que había dejado desparramados en las cercanías de su baúl y con él en la mano comenzó a correr hacia las escaleras. Subía los escalones de dos en dos disculpándose con la gente con la que chocaba, mirando el mapa, que había conseguido sacar sin que se cayera todo lo que guardaba en la mochila, e intentando respirar profundamente para no llegar demasiado acalorada y despeinada.
-Buenos días, ¿esta es el aula de Runas Antiguas o me he equivocado de piso?-Chloé, con las mejillas algo sonrosadas y haciendo su aparición en el aula cinco minutos antes de la clase, se dió cuenta de la estupidez que acababa de cometer, en cuanto se fijó en la pizarra vió el nombre del profesor y la hora a la que iba a ser la clase...Mal empezamos.