En direccion al salon [Allie]

Ya habían pasado las vacaciones de verano y nuevamente llegó el otoño. En todos los pasillos estaban colgados anuncios sobre la fiesta de Halloween y todos los chicos estaban ya locos con esta fiesta. En clases no prestaban tanta atención como antes y era normal.

Después de desayunar, había ido a mi dormitorio a recoger unos libros y pergaminos para preparar la clase. Prefería el aula de la torre de astronomía, donde daba la clase, ya que estaba cansado de siempre estar en mi habitación. Necesitaba un cambio. Salí de mi dormitorio con los pergaminos y unos libros en mis manos. La puerta se cerró enseguida después. Así evitaría que intrusos entren a mi habitación a fisgonear. Cuando salí, después de hacer unos pasos, choco con una bella alumna. ¿Qué estaba haciendo allí? Si mal no recuerdo, hoy no daba clases con los Ravenclaw y los Hufflepuff. Para mi clase los había grupado por casas o no cabían.

-¡Disculpe! ¡Fue mi error! Andaba distraido.- Pedí perdón en cuanto nos incorporamos. Todavia la tenía cogida en mis brazos para evitar una caída. -¡Perdón!- Pedí perdón en cuanto realizé que nos habíamos acercado demasiado. En cuanto nos incorporamos nos separamos.

Yo andaba algo distraída, tenía la cabeza perdida en muchas cosas, sobretodo en algunos problemas familiares, Albert se estaba empeñando en hacerme entrar en razón y que la vida de mago no era necesariamente lo que tenía que escoger. La ultima carta que me envío era casi como un reproche contra los actos de violencia de los mortifagos, lleve la mano a mi cara cerrando los ojos, tan breve pero que inconcientemente me hizo tropezar con una persona. Parecía ser una arbol en mi camino, ten rígido y grande que mis piernas se turbaron para hacerme caer, claro que así como era grande, él me tomo con sus manos, que en cierto modo me recordó al toco de un hombre grande, como él de Albert. Levante la mirada y era justamente como pensaba… era el profesor de Astronomía…

- - no… también es mi culpa…. - le respondí, le dije una ves que estuve bien parada en el suelo. Me sentía como una niña de primaria, aunque me gustaban mucho las clases del profesor… no lo conocía mucho.- ya sabe lo que dicen profesor, nada es casualidad sino causalidad…- ya estaba hablando como una ravenclaw, era inevitable hacerlo. Le sonreí, estaba acostumbrada a estar con los mayores y me sentía más cómoda con ellos.- ¡profesor… tienes clases?..- quizas si me quedaba charlando con él, me sacaría una que otra idea.-